

No llegò exactamente volando.
Sabìa que alguna vez estaría conmigo, pero siempre creí que sería mucho mas adelante.
Generaría depresión,... y seguro que lo hace.
A veces creí que "¡¡ a mi no !!", pero pasò que "a mì sí".
Sabía que su lugar debajo de la cama generaría inquietudes, pero nunca creí que tantas.
.
Uno trata de ignorarlo, comprenderlo, .... pero su presencia se percibe, se huele, molesta, denigra ...
Llegó a mi vida después de una operación de tobillo, .... podía haber sido peor.
De todas maneras ya se instaló en mi casa y no hay vuelta atrás.
¡¡ Ya soy un cincuentón con papagayo debajo de la cama !!!
Ya nada será igual.